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¿Cómo es el yate más caro del mundo?

Yate History Supreme

Ideado por el famoso diseñador de lujo británico, Stuart Hughes, el yate History Supreme es el navío más caro que en la actualidad surca los mares. El mismo fue vendido al magnate malayo, Robert Kuok, por la, para nada módica, cantidad de 3.800 millones de dólares de los Estados Unidos de América (equivalentes a unos 2.700 millones de euros). Lo más curioso es que la embarcación no cuenta con ese precio de venta, en virtud de sus especificaciones técnicas, prestaciones o amplitud de sus espacios; sino que su diseñador decidió que el vehículo acuático fuera construido en oro macizo.

Toque de Midas

Hughes es conocido en el mundo de los artículos de lujo, pues tiene la capacidad, como ocurriera con el Rey Midas, de convertir las cosas más comunes, en oro. En su portafolio, cuenta con diversas modificaciones realizadas a equipos como teléfonos inteligentes, ordenadores portátiles, consolas de videojuego, muebles, indumentaria e inclusive botellas de licor, a los cuales ha incrementado significativamente su valor, a través de la implementación de coberturas de metales preciosos y diamantes. Sin embargo, en esta oportunidad quiso ir más allá, lo que lo llevo a querer diseñar el yate más costoso del mundo.

Metales preciosos y huesos

Aparte de ser construido en oro, el History Supreme cuenta con otros metales preciosos en su construcción, entre los cuales resalta el platino, que otorga una fina delicadeza a algunos detalles en el dormitorio principal. En total, el barco cuenta con 100 toneladas de metales nobles. Adicionalmente, cuenta con una escultura realizada con, nada más y nada menos, huesos de un Tiranosaurio Rex, desenterrados del desierto de Arizona en Estados Unidos. Nada más esta escultura, es valorada en 90.000 USD. Por otra parte, cuenta con otras obras de arte adicionales, que ayudan a crear una atmósfera única.

El espacio en tu yate

En la recámara principal, también hace acto de presencia, una soberbia pared, cubierta parcialmente por rocas provenientes de meteoritos, las cuáles, como probablemente puedes haber anticipado ya, no son para nada económicas, ni sencillas de conseguir. En su interior, el diseñador ha añadido alguna de sus otras creaciones, para hacer más agradable la estadía de su dueño, tales como una botella de licor, adornada con diamantes de 18,5 quilates, valorada en los 42 millones de euros y un iPhone decorado con 500 diamantes.

Piedras preciosas

Otra de las instalaciones poco comunes que ostenta el ansiado vehículo marino, es un acuario panorámico que hace las veces de pared en una de las caras del barco, y en su construcción se han empleado 68 kilos de oro de 24 quilates. La pedrería también juega un papel de importancia en la decoración, por lo cual se encuentra presente en la cara externa del barco y en algunos detalles de su interior, encontrándose entre ellos, diamantes y otros minerales preciosos.

El oro no sólo recubre la cara de externa del barco, sino que además ha sido empleado para construir la base de la cubierta, el comedor, las barandas y pasamanos, así como el ancla. Como cabría esperar, también la cubertería está elaborada en oro macizo.

Amplio comedor

A Hughes le tomó un total de tres años terminar de elaborar esta lujosa obra de arte, trabajando en conjunto con un grupo de orfebres y joyeros. El yate cuenta con una longitud de 30 metros, desde la proa hasta la popa y cuenta con instalaciones como un amplio comedor, que consta con un techo de cristal, el cual permite iluminar con luz solar todo el espacio y observar las estrellas en las noches. Esta área también cuenta con un amplio armario, en el que se tienen a buen resguardo los implementos necesarios para que los comensales puedan disfrutar de una increíble cena, así como una mesa de cristal grueso, con capacidad para albergar a 6 afortunadas personas.

Espacios abiertos

También cuenta con una estancia al aire libre, en la que se ha dispuesto un cómodo sofá y una pequeña mesa de vidrio con patas de oro, ideales para leer un libro mientras se disfruta de la suave brisa marina, o para desayunar mientras se aprecia el infinito mar azul. También cuenta con una pequeña sala de estar, bastante austera (si tal término es aplicable a alguna de las instalaciones del barco), conformada por dos sofás de cuero, con dos mesas auxiliares.

Mobiliario de la habitación principal

La habitación principal cuenta con una amplia tamaño King, con dos mesas auxiliares, también exhibe un pequeño escritorio, así como un amplio panel de luz en el techo, la cual permite iluminar la amplia estancia. Su mobiliario está hecho en madera, con acabados de lujo, así como detalles en metales y piedras preciosas.

Por otra parte, cabe destacar que muchos de los detalles en relación a los espacios y contenidos de este vehículo, permanecen en el más absoluto misterio al día de hoy.